Volver

Los 6 aspectos del bienestar

¿Cómo mejorar el bienestar para tener una vida saludable?

 

El bienestar puede significar diferentes cosas para diferentes personas. Para algunos, el bienestar tiene que ver con los objetivos de acondicionamiento físico: qué tan rápido correr, qué tan fuerte ser, qué tan lejos andar en bicicleta. Para otros, la actividad física sola no refleja el bienestar a menos que esté equilibrada por la salud espiritual o emocional. 

 

En verdad, muchos factores determinan el estado de nuestro bienestar general. Nuestro entorno, las conexiones sociales, lo que comemos y cómo pasamos nuestro tiempo influyen en qué tan saludables (o poco saludables) somos. Se podría decir que la calidad de nuestro bienestar depende de la "totalidad" de nuestro bienestar. 

 

Una cosa es cierta para todos: el bienestar es una elección consciente. Cada individuo debe decidir cómo y qué elementos equilibrar para lograr su propio bienestar personal y óptimo. 

 

Para ayudar a enfocarte en los mejores elementos de bienestar para tu vida, el Instituto Nacional de Bienestar sin fines de lucro ha identificado seis dimensiones de bienestar. * Formulado por primera vez en 1976 por el Dr. Bill Hettler, las seis dimensiones están interconectadas para ayudar a crear un entorno completo y global. Estilo de vida más saludable. 

 

1. Dimensión física. Hacer ejercicio y comer bien se han convertido en sinónimo de bienestar y, de hecho, son vitales para la buena salud. La necesidad de una actividad física regular y el compromiso de tomar decisiones de nutrición adecuadas son fundamentales para tu ruta de bienestar.

2. Dimensión emocional. Aceptar los sentimientos propios y los sentimientos de los demás también es vital para el bienestar. El bienestar emocional incluye la capacidad de lidiar con el estrés, mantener el optimismo y desarrollar independencia y autonomía mientras se equilibra y disfruta de relaciones satisfactorias.

3. Dimensión ocupacional. La satisfacción personal profunda y el enriquecimiento pueden provenir de actividades profesionales. Cuando participa en un trabajo gratificante que te permite utilizar tus habilidades y talentos únicos para hacer una contribución positiva, usted logra el bienestar ocupacional.

4. Dimensión social. Contribuir al medio ambiente y a la comunidad también son factores importantes para el bienestar. Trabajar para hacer del mundo un lugar mejor y más saludable se refleja en esta dimensión. También lo es fomentar relaciones positivas que resultan en beneficios de salud positivos. Reconocer la interdependencia entre los demás y la naturaleza y esforzarse por vivir en armonía ayuda a crear bienestar social.

5. Dimensión intelectual. Participar en actividades mentales creativas y estimulantes puede ser tan crítico para el bienestar como participar en actividades físicas. Expande tu conocimiento, desafía tu curiosidad y aborda la resolución de problemas para desarrollar y mantener tu bienestar intelectual.

6. Dimensión espiritual. La búsqueda del significado en la vida y el propósito de la búsqueda ayudan a establecer un sistema de valores personales que puede apoyar tu bienestar espiritual. Cuando estás espiritualmente bien, mantienes la paz interior a pesar de las decepciones y dificultades de la vida. Vive cada día de una manera que sea consistente con tus valores y creencias, mientras que eres tolerante con las creencias de los demás. 

 

Cuando aspiras a cada una de las dimensiones del bienestar, ten presente este principio esencial: ¡el bienestar es un proceso, que requiere una aceptación amorosa mientras se encuentra en el viaje! ¡Aquí está a tu salud! 

 

* Instituto Nacional de Bienestar. 

 

Más artículos
Anterior
Siguiente
Más artículos
Anterior
Consejos para vivir activamente con incontinencia
Siguiente
5 cambios sencillos en su estilo de vida que puede realizar desde hoy